Mielomeningocele
Meningocele lumbar
Meningocele occipital
Mielo-meningo-cisto-cele
Lipomielocistocele
Las malformaciones congénitas del sistema nervioso central (SNC) son anomalías en el desarrollo del cerebro, la médula espinal o el cráneo que ocurren durante la gestación. Pueden presentarse de forma aislada o como parte de síndromes más complejos, y su impacto varía según la severidad y la región afectada.
Principales malformaciones congénitas:
Defectos del tubo neural: incluyen el mielomeningocele, una forma grave de espina bífida en la que la médula espinal y sus meninges protruyen a través de un defecto óseo; la espina bífida oculta, donde la médula está cubierta por piel y no hay protrusión visible; y los encefaloceles, en los que una porción del cerebro o sus cubiertas sobresale a través de un defecto en el cráneo.
Malformaciones medulares: como la diastematomielia, una anomalía en la que la médula espinal está dividida en dos segmentos por un tabique óseo o fibroso, los lipomas medulares, que pueden estar asociados a disrafismos espinales y la siringomielia, una condición en la que se forma un quiste lleno de líquido dentro de la médula espinal, lo que puede provocar debilidad progresiva, pérdida de sensibilidad y dolor crónico.
Alteraciones en el desarrollo cerebral: Algunos ejemplos son la holoprosencefalia, un fallo en la división del cerebro en hemisferios durante el desarrollo fetal; la agenesia del cuerpo calloso, que afecta la comunicación entre ambos hemisferios cerebrales; la displasia septo-óptica, que puede asociarse a hipoplasia del nervio óptico y disfunción hipotalámica; y la malformación de Dandy-Walker, caracterizada por hipoplasia del cerebelo, dilatación quística de la fosa posterior y dilatación de los ventrículos cerebrales.
Quistes aracnoideos: lesiones quísticas congénitas llenas de líquido cefalorraquídeo que pueden encontrarse en diversas localizaciones intracraneales o espinales. Aunque en muchos casos son asintomáticos, pueden provocar síntomas por efecto de masa o alteraciones en la circulación del LCR, requiriendo tratamiento quirúrgico en casos seleccionados.
Malformación de Chiari: se produce cuando una parte del cerebelo (las amígdalas cerebelosas) desciende a través del foramen magno, pudiendo generar alteraciones en la circulación del líquido cefalorraquídeo y compresión de estructuras nerviosas. Sus síntomas pueden incluir cefalea, trastornos del equilibrio, debilidad, alteraciones sensitivas y en algunos casos, siringomielia.
Alteraciones en el crecimiento craneal: como la microcefalia, en la que el perímetro cefálico es menor al esperado para la edad y puede estar asociada a retraso del desarrollo.
Síntomas:
Los signos clínicos dependen de la malformación y pueden incluir hidrocefalia, alteraciones en el desarrollo motor o cognitivo, convulsiones, debilidad muscular, trastornos visuales y anomalías en la forma del cráneo o la columna.
Diagnóstico:
Se realiza mediante estudios por imágenes como ecografía prenatal, resonancia magnética y tomografía computarizada, que permiten identificar la anomalía y planificar el tratamiento adecuado.
Tratamiento:
El abordaje depende del tipo y la gravedad de la malformación. En muchos casos, se requiere cirugía para corregir defectos anatómicos y evitar complicaciones neurológicas. Otros casos pueden manejarse con seguimiento clínico, rehabilitación y un enfoque multidisciplinario.
El diagnóstico precoz y un tratamiento individualizado son clave para mejorar la calidad de vida del paciente.
Chiari
Siringomielia
Quiste aracnoideo supraselar gigante
Quiste aracnoideo temporal
La Fotografía de la izquierda muestra un Quiste Aracnoideo de localizción Selar y Supraselar, gigante, en un niño de 2 años de edad. Inmediatamente a la derecha se visualiza la resolución del mismo luego de la cirugía.
La fotografía de la derecha muestra un gran quiste aracnoideo hemisférico. Inmediatamente a la derecha se observan imágenes postoperatorias que muestras la significativa disminución de tamaño.
Ambos quistes fueron operados por vía endoscópica.
Asimetría de miembros inferiores en paciente con médula anclada
Meningocele dorsal